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Control de flotabilidad: ¿por qué me hará la vida más fácil?
Básicos sobre la flotabilidad en buceo
Tips para mejorar mi flotabilidad en buceo
Nada como una buena certificación y practicar
Bucear suena maravilloso, ¿no? Sentir que vuelas bajo el agua, el sonido de las burbujas, una paz diferente. Tu idea preciosa del buceo se acaba cuando te sumerges y no puedes lograr ni lo básico: mantener tu flotabilidad. Así vas como boya loca, subiendo y bajando sin control y poniendo nerviosos al resto de tus compañeros de buceo. Afortunadamente, puedes evitar todo este show con la información adecuada. Aquí te compartiremos unos tips para lograr un buen control de flotabilidad en buceo y hacer de tu experiencia más disfrutable.
Control de flotabilidad: ¿por qué me hará la vida más fácil?
En buceo, se le llama flotabilidad positiva cuando asciendes, flotabilidad negativa cuando desciendes hacia la profundidad y flotabilidad neutra cuando te mantienes en el mismo punto, sin subir ni bajar. Cuando controlas estos tipos de flotabilidad a consciencia, podemos decir que ya la armaste. Básicamente, esta es uno de los grandes aspectos que separan a un buzo experto de uno novato.
Flotar bien no se trata de sólo verte cool mientras buceas, sino de mantener tu inmersión lo más segura posible. Velo así: es como manejar un carro estándar. No te puedes lanzar al salvaje tráfico de la Ciudad de México si no sabes cómo arrancar, frenar y cambiar la velocidad correctamente. Al sumergirte, tus movimientos tienen consecuencias. Por eso, tener un buen control de flotabilidad en buceo te permitirá evitar numerosos accidentes y tener una mejor experiencia. A continuación las ventajas más notorias de saber dominarla:
Seguridad
Si te mueves con seguridad en el agua evitarás accidentes. La mayoría de estos ocurren cuando usas lastre de más o de menos. Si, por ejemplo, vas muy ligero y asciendes con rapidez, podrás perderte tu parada de seguridad, resultando en síndrome de descompresión. Esto es algo que quieres evitar a toda costa y es peligroso. El síndrome ocurre cuando el nitrógeno que está disuelto en la sangre y tejidos por la alta presión, se transforma en burbujas cuando la presión disminuye (es decir, en tu ascenso). Estas burbujas pueden lastimar tus tejidos u obstruir los vasos sanguíneos. Cuando esto ocurre, presentas síntomas parecidos a los de un accidente cerebro-vascular y se debe tratar inmediatamente. Controlar tus ascensos y descensos a voluntad te harán vivir una experiencia súper segura de buceo.
Consumo de aire y energía
Cuando te mueves en exceso o estás nervioso, tiendes a consumir mayor oxígeno de tu tanque, incluso hasta un tercio de él en poco tiempo. Si esto ocurre, estarías limitando considerablemente tu tiempo de inmersión. También, tiendes a agotarte tempranamente. Con una flotabilidad neutra podrás estar más relajado, administrando correctamente tu aire y energía. ¡Aprovecha cada minuto de tu inmersión!
Proteger el entorno natural
Si vas como un torpe ente sin rumbo, es muy probable que choques con otros buzos, con corales, con el fondo marino, con estalactitas…¡nadie se salva! Los corales ya tienen suficientes problemas con la enfermedad del blanqueamiento, el cambio climático, la contaminación de los mares como para que vayas tú a chocar con ellos y destruirlos. No, ¡no es opcional! Recuerda que estás de visita y debes respetar el ecosistema.
Mejor experiencia de buceo
En general, tener una buena flotabilidad en buceo te hará tener una experiencia maravillosa. Te dará seguridad, podrás acercarte con cautela a observar lo que te interese y no estarás preocupado pensando en cómo moverte. Sin duda lo vas a disfrutar infinitas veces más.
Básicos sobre la flotabilidad en buceo
El Principio de Arquímedes
¿Te acuerdas de tus clases de física de la secundaria? Quizás te suene el Principio de Arquímedes. Aquel griego todólogo (como estaba de moda en la Edad Antigua); físico, matemático, astrónomo, ingeniero e inventor. Este científico descubrió que todo cuerpo sumergido recibe una fuerza de empuje vertical igual al peso del líquido desplazado. Cuando te metes a una tina con agua observarás que el nivel del agua sube, eso es porque tu cuerpo ocupa espacio y estás desplazando al líquido que iba antes en tu lugar. Este principio opera notoriamente cuando buceas y es por eso que para evitar que esta fuerza te empuje, debes manipular ciertas cosas.
Hay muchos factores que van a afectar cómo flotas en el agua. El equipo que usas, el lastre que llevas, tu peso corporal, el tipo de traje de neopreno, si solo vas en traje de baño, tu manejo del BC, el tipo de agua en donde nadas (salada, dulce) y tus pulmones. Vaya, ¡sí son muchas cosas que checar! De primer momento, tendrás que comenzar probando, hasta que logres la cantidad correcta de lastre para ti y las condiciones particulares de tu inmersión.
Descenso
– Si tienes la correcta cantidad de lastre:
- — Respirando normal, el agua estará a la altura de tus ojos
- — Si llenas tus pulmones, el agua permanecerá a la altura de tu barbilla
- — Si sacas todo el aire de tus pulmones, vas a descender
– Cuando tienes lastre de más: aunque tengas tus pulmones llenos de aire, te vas a hundir.
– Cuando tienes lastre de menos: exhalarás todo el aire que tengas y aún así no te sumergirás.
Para sumergirte, debes permanecer parado con las aletas mirando hacia la profundidad en el primer metro. Después ya podrás adoptar la clásica posición horizontal de buceo. Agregar pequeños soplos de aire a tu BC, te ayudará a tener un descenso controlado.
Es importante que desciendas con lentitud, para que te dé chance de ecualizar tus oídos. Te recomendamos esta entrada sobre cómo evitar el dolor de oído en buceo o apnea. También, debes descender tranquilo para que no pierdas contacto con tus compañeros de buceo y no choques con el arrecife de coral, por poner un ejemplo.
Nado
Nadar con tu cabeza mirando hacia la profundidad es algo complicado. El aire tiende a buscar la superficie, por lo tanto es difícil sacar el aire de tu BC. Para esto, es preferible usar tu válvula de descarga a la altura del riñón. Ya sea que nades hacia arriba o hacia abajo, ambas maneras hacen que consumas más aire con mayor rapidez, limitando tu tiempo de inmersión. Lo más recomendable es que logres una flotabilidad neutra.
Respiración
Es muy importante que nunca aguantes la respiración cuando practiques buceo. Si lo haces mientras asciendes sin querer, puedes ocasionarte una lesión por sobreexpansión pulmonar. Ahora, imagínate que tus pulmones son como unos globitos internos que te ayudan a flotar: si se llenan de aire vas a subir y si exhalas todo el aire, vas a bajar.
Ascenso
Muchos buzos novatos usan su BC como un dispositivo para ascender. No, esto no es nada recomendable. ¿Por qué? No tienes control sobre la velocidad a la que asciendes y una vez más, corres riesgo del famoso síndrome de descompresión. Lo adecuado es que te mantengas en posición horizontal de buceo y asciendas lentamente. Una manera de hacerlo es usar tu válvula del riñón, así irás controlando la velocidad y podrás hacer tu parada de seguridad.
Tips para mejorar mi flotabilidad en buceo
Relájese, mi buen
Por lo general, cuando haces una actividad nueva, te pones nervioso. Esto es súper normal pero intenta relajarte a consciencia. Pon atención a tu respiración y observa cómo afecta tu flotabilidad. Entre más relajado estés, menos aire consumirás y podrás dominar mejor tus movimientos. ¡A relajarse!
Estima el peso
El peso que llevas será afectado por tu peso corporal, la cantidad de lastre, el tamaño del tanque de oxígeno, el material del que está hecho y el traje de neopreno que lleves. Usa sólo el lastre que necesites. Cada kilo debe estar perfectamente justificado. Si tienes duda, haz una prueba en el agua antes de sumergirte por completo.
Conoce tu equipo
Dependiendo del traje de neopreno y el tanque que uses, vas a tener diferentes resultados. Los tanques de oxígeno pueden ser de aluminio –que es un material mucho más liviano– o de acero –por el contrario, más pesado. En cuanto a los trajes de neopreno, los más gruesos poseen una capa mayor de burbujas, por lo que flotan más a diferencia de los más delgaditos. Otra variable que los afecta es qué tanto uso han tenido, pues con el paso del tiempo estas burbujas se desgastan y los trajes flotan menos.
Uso adecuado del BC
Si tienes el peso correcto, no tiene por qué usar demasiado tu BC. Conforme desciendes es recomendable que vayas agregando aire a tu BC para así lograr una flotabilidad neutra. Se usa la lógica contraria para ascender, solo debes ir sacando aire poco a poco para que no subas tan rápido y lo logres de manera suave y relajada. Úsalo solo cuando sea indispensable, no dependas mucho de él. Verás que vas aprendiendo a controlarlo con mayor destreza.
Posición del cuerpo
Una posición correcta permitirá que te muevas con mayor sutileza. Debes estar en posición horizontal, con las piernas dobladas en un ángulo de 90 grados y las aletas mirando hacia atrás. Esta posición es cómoda y te dará mayor libertad para desplazarte. Así podrás moverte hacia adelante y no hacia arriba o abajo de manera involuntaria. Si no puedes mantener esta posición, muy probablemente no tengas bien distribuido el peso de tu lastre y equipo.
Usa tus pulmones
Como ya mencionamos arriba, tus pulmones son un dispositivo natural para controlar tu flotabilidad. Los llenas, asciendes, los vacías y descenderás. Esto será una de las claves para que te muevas como un pro bajo el agua. Si quieres ascender inhala lentamente y exhala con mayor rapidez. Por el contrario, si quieres descender un poco, exhala lentamente e inhala un poco más rápido.
Toma en cuenta el tiempo y profundidad
Conforme vas sumergiéndote en la profundidad todos los espacios con aire y gas se comprimen. Eso incluye espacios en tu cuerpo y las burbujas de tu traje de neopreno, por lo que tendrás que compensar con tu BC. Recuerda que a medida que vas subiendo, el aire de tu BC se expande, así que ve soltando por a poco. Si no, lo único que pasará es que subirás muy rápido y tendrás el riesgo del síndrome de descompresión. También recuerda que conforme más vas consumiendo el oxígeno de tu tanque, se hace más ligero. Deberás compensar esta situación al igual.
Nada como una buena certificación y practicar
Por supuesto que este artículo no pretende suplir un buen entrenamiento de buceo. Es necesario que si quieres bucear te certifiques con expertos ya sea en PADI o SDI. En este enlace te explicamos la diferencia entre ambas certificaciones y cuál te conviene más. También te compartimos opciones para que te certifiques a lo largo y ancho de México. Probablemente pase algo de tiempo antes de que te hagas un experto controlando tu flotabilidad. Estas son habilidades que llegan con la práctica, así que sé paciente y no dejes de bucear, siempre en compañía de expertos u otros buzos certificados.
Cuéntanos sobre tus experiencias en inmersiones, ¿cuánto tiempo te tomó dominar tu flotabilidad? ¿O lo sigues intentado? ¿Qué ha sido lo más difícil para ti? Déjanos tus historias y opiniones en la sección de comentarios, ¡gracias por compartir con nuestra comunidad deportiva!
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