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Este fin de semana se presentó una situación polémica en el Grand Slam de los Estados Unidos dentro del tenis. El número uno del mundo, Novak Djokovic, fue expulsado durante su partido de octavos de final en el US Open ante el español Pablo Carreño, debido a que el serbio le dio un pelotazo a una jueza.
Voy a explicar cómo se dio esta situación; se jugaba el primer set, Carreño le estaba dando pelea a Djokovic y tras perder un punto que le costó el saque a Nole, molesto golpeó una pelota con su raqueta haciendo una rabieta. Para su mala fortuna, la esférica fue a dar directamente a una jueza de línea. Laura Clark de inmediato se quejó y gritó de manera preocupante. Hacía la indicación de que no podía respirar ya que la pelota impactó en su garganta. Djokovic y una de las representantes del torneo se acercaron para ver cómo estaba. Afortunadamente, después de unos minutos la mujer se recuperó, pero el juez de silla se acercó con los tenistas para informarles que “Nole” estaba descalificado.
El Artículo III del Código de Conducta regula las infracciones de los jugadores sobre la pista. Los tenistas no podrán agredir en ningún momento a ningún oficial, rival, espectador o cualquier otra persona dentro de los límites del lugar del torneo. En circunstancias flagrantes y particularmente perjudiciales para el torneo, o que sean especialmente ofensivas, una sola falta puede constituir una Infracción Grave de Comportamiento y quedar sujeta a sanciones adicionales. El Apartado T establece que cualquier infracción del Código de Conducta (salvo las relacionadas con la puntualidad o la vestimenta) puede acarrear la expulsión del torneo y la pérdida de todos los puntos ATP que hubiera ganado hasta el momento en caso de que se considere lo bastante grave.
La sanción para el atleta serbio es en primer lugar perder su invicto de 25 partidos. Además como dice el reglamento, no podrá sumar los puntos de este torneo, recordando que el ranking de la ATP se basa en los puntos obtenidos al participar en los eventos del mismo. Adicional a eso, Djokovic tendrá que devolver el dinero que recibió solo por participar en este US Open, pagar una multa económica cercana a los 20 mil euros y —lo más doloroso para Djokovic— perder la oportunidad de conseguir su título 17 del Grand Slam. Al no participar Roger Federer y Rafael Nadal, el balcánico era el máximo favorito para quedarse con el torneo.
Si bien es cierto que no era la intención de Djokovic agredir a la jueza, el tenista perdió por un momento la cabeza y ese descuido le costó muy caro. Después Djokovic dialogó unos minutos con el juez principal e hizo unos lamentables comentarios; dijo que la jueza estaba bien y que no iba a requerir ir al hospital. Como vimos en el reglamento, es clara la infracción, por lo que era un desperdicio tratar de convencer al juez: la decisión estaba tomada.
Djokovic salió del complejo sin hablar con nadie y más tarde publicó en sus cuentas oficiales un comunicado de prensa disculpándose con la organización y con la jueza por todo lo ocurrido. En definitiva, no ha sido el año de Novak ya que tenemos que recordar lo criticado que fue por el torneo que organizó en plena pandemia, en el cual varios involucrados dieron positivo por COVID-19.
No es la primera ocasión en que un deportista se ve involucrado en algo de este tipo. Ha pasado en el béisbol, en el fútbol e incluso en el mismo tenis, como el caso de David Nalbandian, que por patear un letrero provocó un golpe a un juez de línea en 2012 durante el torneo de Queens y también fue descalificado.
Así que solo queda aprender por parte de los atletas a controlarse. Es cierto que en las competencias el sentimiento está a flor de piel y la presión que tienen es importante, pero no pueden distraerse en estos aspectos porque un error puede costar muy caro en todos los sentidos, como le pasó a Novak Djokovic.
